El partido, el segundo de esta serie al mejor de siete, se llevará a cabo otra vez en el Staples Center de Los Angeles, por lo que los anfitriones buscarán la forma de salir otra vez por la puerta ancha para confirmar su ventaja de localía.
Esta serie es una revancha de la final de 2008, ganada por Boston con balance de 4-2.
Por los ‘laguneros’, que ganaron el primer cotejo cómodamente 102-89, los olímpicos Kobe y el español Pau Gasol se desbordaron sobremanera con 30 y 23 puntos, respectivamente, además de 14 rebotes el europeo.
El veterano Ron Artest jugó un papel importante en ese triunfo con 15 tantos y una defensa de mucha presión, que por momentos vuelve loco a sus rivales.
Los Lakers tratarán de marcar de nuevo el ritmo del partido como en el primer encuentro, donde mostraron mayor efectividad en tiros de campo y mejor defensa colectiva.
Esta final enfrenta a las dos franquicias más condecoradas de la NBA, con 17 títulos de los bostonianos y 15 de los laguneros, empero, los Celtics han vencido a los Lakers en las finales por el título en nueve ocasiones y sólo han perdido en dos ocasiones.
El quinteto de Los Angeles cuenta con el experimentado técnico Phil Jackson, quien obtuvo dos títulos de la NBA como jugador, y con el pergamino ganado el pasado año se quedó con el récord absoluto como entrenador con 10 campeonatos.
Ambos equipos saben cómo sacar partido a su defensa colectiva y al juego de intensidad, y lo demostraron en momentos críticos de estos playoffs, cuando los Lakers dejaron en el camino a Oklahoma City y los Phoenix Suns, y Boston al Cleveland de LeBron James y a Orlando Magic.
Los Celtics, que avanzaron a base de una defensa cerrada en la zona pintada, cuentan también con el efectivo armador Rajon Rondo, quien acostumbra a alimentar a sus compañeros con efectivos pases.
Fuente: Listín Diario
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